Más información sobre la implantología

La pérdida de un diente puede implicar problemas físicos y de salud como estos, además de una baja autoestima por cuestiones estéticas.

• Migración de los dientes
• Pérdida ósea
• Alteración de la mordida como consecuencia del movimiento dental
• Stress adicional en los dientes remanentes
• Dificultad para masticar

La colocación de los implantes dentales son la solución más acertada cuando se produce la ausencia de una pieza dental.

La colocación de implantes dentales en el hueso maxilar permite devolver al paciente su función masticatoria y reconstruir fielmente el aspecto de los dientes, el confort y la estética_ facial.

Una vez colocado el implante dental, dentro del hueso se coloca una prótesis (de un solo diente o de más de uno, atornillado o cementado) fija al implante. Esto permite mantener intactos los dientes vecinos.

De este modo se evita recurrir a la colocación de un puente, que implicaría el tallado de los dientes sanos adyacentes, o de una prótesis parcial total o removible. Estos tipos de prótesis dental son una solución menos estética, además de ser menos aceptadas por el paciente debido a su poca estabilidad a corto y a largo plazo.

Los implantes dentales mejoran la calidad de vida y presentan los siguientes beneficios:

• Preservan la integridad de los dientes adyacentes, sin necesidad de realizar un puente
• Devuelven la función masticatoria
• Distribuyen las fuerzas oclusales
• Mantienen el nivel óseo del maxilar
• Tienen una función y estética semejante a la de un diente natural
• Mejoran la estética facial y previenen la pérdida ósea
• Mejoran la capacidad del habla